Media Maratón de Lisboa 2016 – La crónica

Hola a todos! Mucho tiempo ya desde la última entrada… aunque no muchas carreras, la verdad. Tan sólo la 14k del Ebro en Febrero, muy muy dura como siempre, incluso más este año con el terreno embarrado (y con el cierzo de rigor). Y también triste, con la muerte de Daniel de la Tova, un compañero corredor en la versión de 30k.

El caso es que todo el entrenamiento del invierno y esa 14k del Ebro han ido orientados al objetivo de la primavera: La Media de Lisboa.

Entes de empezar con la crónica de la carrera y, para el que no haya estado, Lisboa es una ciudad preciosa. Ha sido mi primer viaje a la capital portuguesa, y seguro que no será el último. Y mucho mejor visitarla en estas fechas…. porque, como en otros sitios (se me ocurre Roma), se intuye el calor y las ‘penurias’ que se tienen que pasar en una visita veraniega. Os dejo alguna foto de la belleza de esta capital:

Miradouro da Graça

 

Miradouro Santa Luzia

 

Tranvía 28

… y podría seguir con muchos más descubrimientos, gastronomía, etc… Pero vamos, que aquí venís para leer la crónica 😉

 

La Media de Lisboa es una Gold Label de la IAAF, lo que garantiza un cierto ‘nivel’, esencialmente en cuanto a participación élite, pero también en cuanto a organización, servicios, etc. La verdad es que para el corredor está todo bastante bien pensado. La salida está bastante alejada del centro, en el peaje del puente del 25 de Abril, con lo que hay que tomar un tren (es lo más obvio, y lo que te sugiere la organización) desde el centro de Lisboa hasta la salida. El día de la carrera, todos los transportes públicos son gratuitos para los corredores, con lo que no te tienes que preocupar de llevar dinero o pase para llegar a la salida, sino simplemente de enseñar tu dorsal en las estaciones de tren/metro.

Todas estas indicaciones las puedes ver en la web de la carrera o en la Feria del corredor…. que es bastante floja. La verdad es que esperaba algo más de la feria de una carrera de este nivel. No hay recuerdos conmemorativos de la carrera, apenas unos cuantos stands con los patrocinadores y alguna tienda, pero no esperéis encontraros con mucho más. Eso sí, la entrega de dorsales sin nada de fila. Alguna foto de la feria:

 

La feria y entrega de dorsales está en la zona de meta, al lado del Monasterio de los Jerónimos y la torre de Belem, con lo que es una buena idea pensar en pasar la mañana o la tarde entera en la zona (y, por supuesto, tomarse unos Pasteis de Belem!!!). Esta es la meta:

 

El día de la carrera comienza con el ‘viaje’ a la salida. Desde el centro de Lisboa es una media hora, entre metro (para llegar a una estación con enlace a tren) y el tren de la compañía Fertagus, la única manera de llegar en transporte público a la salida. A esto hay que añadir unos 15 mins. más andando desde la parada del tren de Pragal -lleno de corredores, sin posible pérdida ;)- y los peajes del puente, lugar de la salida. En estas fotos podéis ver el camino hasta la zona de salida:

Entrada a la zona de peaje, ya sólo para corredores.

La parte buena de que la carrera empiece a las 10.30 es que no hay que madrugar en exceso para desayunar con tiempo y acudir a la salida, que es algo que se agradece. La parte mala se conoce al final, cuando el calor apretará cerca de la meta 😦

Una vez en la zona de salida, todavía queda un buen rato hasta empezar. Es una zona muy amplia y con servicios portátiles, no como en otras carreras, donde una vez en esa zona o en los ‘cajones’, estás ya completamente atrapado, sin opción de calentar o ir al baño. Algunas fotos y videos (con mal sonido, la megafonía estaba a tope) de esa zona antes de comenzar:

Aquí se puede ver el mirador del Cristo Rey, un buen sitio para ver la salida y tomar fotos de todos los corredores pasando por el puente.

Vídeos antes de salir:

Y empieza la carrera. Lo más bonito, sin ninguna duda, de todo el recorrido, es la salida por el puente. Son más de 2 kms. hasta que se abandona definitivamente la estructura, y la verdad es que es espectacular poder correr por ahí. Estas fotos no son mías, pero las dejo para que veáis cómo es la salida:

El primer km. tiene bastante atasco. No he salido en la primera oleada y hay que ir adelantando a bastante gente que va despacio, pero hacia mitad de puente ya se puede ir cogiendo el ritmo objetivo. Aunque hay muchísima gente, pasado ese primer km. enseguida se va más cómodo, gracias a la amplitud de la carretera.

Por eso, finalizando ya el tramo de puente, y habiendo disfrutado de las vistas de Lisboa, me doy cuenta de que ya estoy en ritmo objetivo (incluso 1-2 segs. más rápido). Tenía previsto estar en media de unos 4:20/km. allá por el km. 5 o 7, pero la salida ha sido más favorable de lo que pensaba, así que decido mantenerlo ya desde el inicio.

Tras una breve incursión por alguna avenida céntrica, el circuito alcanza de nuevo la zona del Tajo, para ya no dejarlo en todo el recorrido. A partir de aquí, todo lo que queda es linea recta, con 2 giros de 180º para deshacer el camino y terminar en los Jerónimos. Voy manteniendo el ritmo sin problemas, y bebiendo frecuentemente porque va haciendo cada vez más calor y se intuye que en los kms. finales va a apretar bastante… La parte buena de este circuito tan favorable es la casi permanente recta llana de de todo el recorrido, pero lo malo es la ausencia de tramos con sombra donde poder refugiarse un poco del sol.

Los kms. van pasando deprisa. A lo que me doy cuenta es el 8, así que me tomo el gel y cambio la botella de agua para seguir bebiendo (se agradece tener avituallamientos con botella, para poder llevarla un rato y beber mejor). El ritmo va muy bien, incluso un poco mejor de lo previsto (estoy casi en media de acabar cerca de 1:30), y me veo con fuerzas. Sé que va a ser muy difícil mantenerlo hasta el final, pero decido no bajarlo porque los kms. van pasando y eso que me llevo: No queda tanto como para tener que guardar muchísima reserva. Si luego tengo que bajar el ritmo, habré ganado tiempo en esta primera parte y llegaré al objetivo, y si no lo tengo que hacer, haré una marca mejor de lo esperado, alrededor de 1:30.

La carrera es muy fluida y pasa muy muy deprisa. Casi sin darme cuenta estoy en el km. 16, a punto de dar el último giro de cara a meta. Se me ha pasado comentar que en esta carrera no hay liebres (al menos, yo no he visto ninguna). Los que me conozcáis o hayáis leído mis crónicas de otras carreras, ya sabéis que soy partidario de seguir mi propio ritmo, con el reloj… sin tener que depender de posibles ‘tirones’ de una liebre. Pero sí que es verdad que tener a la vista – o ciertas referencias – de cómo van las liebres ayuda a evaluar tu ritmo y a estimar cómo puede evolucionar. Pues en Lisboa nada de eso, y es algo que quizás se echa de menos. Volviendo a la carrera, a partir de ese último giro del km. 17 voy notando cómo me cuesta cada vez más mantener el ritmo y cómo, de hecho, lo voy bajando ligeramente… pero tampoco me preocupa, porque apenas quedan 4 kms., y es el momento de darlo todo para mantener esa previsión de buena marca. Pero tengo que decir que ese final se me hizo eterno, 4 kms. de recta, la última, y la llegada que no se alcanza a ver hasta que la tienes encima. A cada paso veo en el reloj que el ritmo es cada vez peor, y que por muy poco se me va a escapar entrar en esa 1:30, pero aún así voy en un tiempo muy bueno, y en el último km. doy todo lo que me queda para entrar en 1:31:18. Nada menos que 7 minutos mejor que mi anterior marca (en la última Media de Zaragoza), y muy cerquita de esa 1:30, así que muy contento!. Este es el resumen de la carrera:

Os dejo alguna foto y vídeos de la carrera y la llegada:

Ya en la meta

Y para terminar, las conclusiones y reflexiones de siempre:

• La Media de Lisboa me parece una carrera muy recomendable: El circuito va casi todo el tiempo pegado a las vías del tren, y no se ve el Tajo apenas… así que el recorrido no se puede decir que sea bonito (lo que de verdad es espectacular es la salida por el puente, la más bonita que he hecho nunca), pero sí que es fácil, rápido y agradable. La organización es buena, salvo algún tema puntual como las liebres o la ausencia de público en muchos tramos, pero el balance es muy positivo.
• Para el espectador, sin embargo, no es una carrera fácil: El ir todo el rato pegado a las vías inhabilita un lado de carrera para el espectador. Y, por el otro, muchas veces hay carriles reservados para la «Mini Maratona», el típico recorrido menor y fácil para familias, con lo que, a la hora de la verdad, los sitios para ver la carrera no son tantos. Y esto implica que es muy difícil ver la carrera en distintos puntos, pese a que la sencillez de diseño del trazado (en ida-vuelta) pudiera parecer. Por ejemplo, Ana tuvo que quedarse sólo en la zona de meta (sin agobios, eso sí) como mejor opción.
• En lo personal, muy contento con el camino hasta aquí y con el resultado. Me parece un colofón perfecto para todo el entrenamiento del invierno con el grupo de cross de RunningZgz, y una marca para estar muy orgulloso. Todo gracias a Álvaro Lombardo, que me preparó perfectamente para esta carrera, y que sabía mejor que yo hasta dónde podía llegar.

¿Y ahora qué? Pues hasta el verano alguna carrera más caerá pero, sobre todo, seguir disfrutando de este deporte ahora ya con mejor tiempo, y pensando en la cita del Otoño: El Maratón de no sé todavía dónde, pero que pronto habrá que decidir.

Un  abrazo y gracias por leer hasta aquí!